En el Centro Austral de Investigaciones Científicas de Ushuaia

II taller de Operatoria Marítima Antártica

4-6-2012 | Abordaron el tema del desarrollo del Código Polar. Participó un panel de autoridades de la Armada Argentina. Trató sobre la actividad de buques en aguas polares, con énfasis en la conservación ambiental y la salvaguarda de la vida humana en el mar.

USHUAIA – Los pasados martes y miércoles en las instalaciones del Centro Austral de Investigaciones Científicas (CADIC) se desarrolló el “II taller de Operatoria Marítima Antártica” que tuvo como premisa abordar las actuales instancias en la implementación del Código Polar.

Fue organizado por la extensión Ushuaia de la Universidad Tecnológica Nacional y el Centro de Patrones y Oficiales Fluviales, de Pesca y Cabotaje Marítimo y contó con un panel de la Armada Argentina integrado por el comandante Naval Antártico, capitán de navío hidrógrafo Valentín Sanz Rodríguez; el especialista en Código Polar, capitán de navío oceanógrafo Juan Carlos Frías, y el comandante del buque hidrográfico “Puerto Deseado”, capitán de corbeta Pablo Bonuccelli. También disertaron miembros de la Prefectura Naval Argentina.

Entre los ejes temáticos desarrollaron los fundamentos del Código Polar, el estado de avance en su elaboración e implementación, la postura argentina ante los aspectos más relevantes vinculados a los buques y su actividad en aguas polares y las previsiones acerca de su eventual incidencia en el volumen de la operatoria antártica basada en el puerto de Ushuaia.

En conferencia de prensa desarrollada en el Área Naval Austral, el capitán Sanz Rodríguez destacó que “los avances del desarrollo del Código Polar son un documento producido en la Organización Marítima Internacional (OMI) a requerimiento de la reunión consultiva del Tratado Antártico que ha pedido un código ampliado al sector antártico, en base a lo que se ha establecido como directrices para navegación en el aguas del Ártico”.

El jefe naval precisó además que “la Armada está participando del grupo de trabajo y nuestra posición es la de colaborar en la adopción de estas normas de forma que permitan asegurar la preservación de la vida humana en el mar en aguas antárticas”. Es allí –remarcó– donde la Armada tiene responsabilidad en una amplia zona que incluye además la protección del medio marino.

Por su parte, el capitán Frías consideró que “la Antártida está pensada para la paz y la ciencia”, por lo cual “en particular el Código Polar tiene dos aspectos: uno es la seguridad y el otro la protección ambiental”.

Y aclaró que “independientemente de los esfuerzos que se hagan en diseño y equipamiento de buques lo destacado es el incremento de accidentes con buques turísticos. Entonces, independientemente que se promuevan mejores diseños, lo que debemos lograr es que quienes tripulen los buques conozcan el área donde navegan”.

Finalmente, el especialista en Código Polar aseguró que “debemos fortificar los sistemas de salvaguarda de la vida humana en el mar y los sistemas SAR (búsqueda y rescate, en inglés) que la Armada Argentina lleva adelante como Agencia Nacional de Búsqueda y Rescate y que comparte con Chile, Australia, Sudáfrica y Nueva Zelanda”.

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